Martha Toledo

Hacia el año 2000, Martha Toledo decidió incursionar de manera profesional en el mundo de la música. Sus experiencias como aficionada al arte del canto y los comentarios favorables recibidos de quienes la habían escuchado, la impulsaron a tomar esa decisión. Consecuentemente inició sus estudios de canto y con ello la búsqueda de un repertorio musical que satisficiera sus gustos personales, pero que también le permitiera acceder a un público amplio y heterogéneo; de este modo buscó en sus raíces, en la cultura que le circundaba, en las canciones que escuchó desde niña y con las que años más tarde, ya muchacha, fue cortejada; así supo que éste era el entorno que debía acompañarla en su carrera artística.En ese tránsito recibió una invitación para participar en el Tercer Encuentro Mujeres Indígenas, realizado en la ciudad de Chihuahua, en 2004; el resultado de aquella reunión fue un disco titulado Lluvia de sueños; esa experiencia reforzó sus convicciones y le animó a continuar la búsqueda.Poco a poco fue conjuntando las piezas con las cuales integraría un repertorio que le posibilitara, en el futuro próximo, realizar presentaciones individuales. En este proceso se cruzó en su camino un productor musical, oriundo también de la región istmeña, quien le propuso la grabación de un disco; para ello puso a disposición de la artista: estudio de grabación, músicos, arreglistas y su larga experiencia en la producción discográfica, que incluía la edición de 64 volúmenes, muchos de ellos realizados con artistas oaxaqueños.Se dispuso entonces el plan, se diseñó el proyecto para la grabación, se armaron partituras, se programaron los ensayos necesarios y comenzó un largo viaje por los caminos de lo que parecía ser un sueño. Cada jornada de trabajo representaba la necesidad de conciliar el clásico estilo del productor y la inclinación innovadora de la intérprete, en una ida y vuelta que enriqueció decididamente el producto final.CONDICIONES DESENCADENANTESLa relación con Veronika Bennholt-Thomsen, antropóloga que escribió el libro “Juchitan, la ciudad de las mujeres”, quien a su vez me presentó a Uwe Bennholt-Thomsen, su exesposo, que durante muchos años fue director de teatro en Colonia, Alemania. Hace dos años Uwe, tuvo noticias de una mujer de Colonia llamada Virgit Meinel que se dedicaba a contratar artistas de todo el mundo, para un circuito de presentaciones en West-falia, asi que le hizo llegar el dossier de la cantante Martha Toledo. Virgit Meinel le respondió que lo tomaría en cuenta y en la primera oportunidad invitaría a la cantante zapoteca para una gira en Alemania. Fue en Enero del año en curso, que Birgit se puso en contacto con la cantante Martha Toledo, a través de su contacto Uwe Bennholt-Thomsen, esta vez para ofrecerle una gira, que comprende 24 conciertos en noviembre del mismo año.